Forma parte ya del lenguaje cotidiano denominar Zona Cero a aquel espacio (físico o no) que ha sido objeto de un acontecimiento de tal magnitud que, automáticamente, pone el contador a cero en la historia particular de ese sitio (físico o no): primero para que no se olvide y, segundo, para que todo pueda ser reformulado desde ese nuevo punto de partida. El momento actual de crisis generalizada puede convertirse (si no lo ha sido ya) en la Zona Cero para la arquitectura en nuestro país: un espacio de tiempo, concreto, a partir del cual nos veremos obligados a buscar nuevos caminos. / Forms part of everyday language to call Zero Zone to that space (physical or not) that has undergone an event of such magnitude that automatically sets the counter to zero in the particular history of that site (physical or not): first so that is not forgotten and, second, so that everything can be reformulated from this new starting point. The present time of general crisis can become (if it has not already been) at Zero Zone for Architecture in our country: a space of time, concrete, from which we will be forced to seek new ways.

Newsletter 14 / 30_4_2014

Estimados colegas y amigos de arquitecturazonacero

El equipo holandés Korteknie Stuhlmacher Architecten, vuelve a mostrarnos su interesante manera de trabajar la madera en la segunda obra que presentan en este blog: una Escuela de Educación Especial en Rotterdam; tanto el esqueleto portante como los delicados interiores, ambos en madera, se combinan con un exterior en el que echan mano de la importante tradición cerámica de su país; una pieza que podíamos denominar de "arquitectura realista": atenta con las especiales necesidades de los usuarios, trabajada con materiales "de siempre" y preparada para ser "reconocida" (sin estridencias y como edificio público) en la trama de la ciudad.  
    
Tras la pétrea Escuela La Milagrosa (Premio Nacional de Arquitectura 2013 ex aequo con MGM) y la metálica Pasarela en Labrit -ambas en Pamplona-, el tándem navarro Pereda Pérez Arquitectos nos invitan a visitar su propuesta para una vivienda unifamiliar en Villarcayo (Burgos); resuelta mediante dos planos de hormigón suspendidos en el aire -unidos en los ciegos testeros- que alojan un programa residencial pautado por las trazas de los muros interiores. La elegante propuesta se trabaja, en línea con su exacto volumen, con una escueta paleta de materiales: hormigón, cemento bruñido, madera y cristal. 
      

Con el arquitecto catalán Carles Enrich nos acercamos a una vivienda inteligentemente insertada entre los muros de un antiguo bajo comercial destinado anteriormente a tintorería. El autor consigue un espacio fluido, mediante distintas plataformas, sacando el máximo partido a la importante altura libre del local; un interior diáfano que se apoya en el cuidado diseño del mobiliario que delimita los distintos espacios. El viejo local cobra una nueva vida cuando éste se transforma en una vivienda abierta a un magnífico patio en el barcelonés barrio de Gracia.

Escuela de Educación Especial en Rotterdam, Holanda


Tras el cristal / Vivienda unifamiliar en Villarcayo, Burgos 











Nueva vida / Reforma de una casa con patio en Gracia, Barcelona



Saludos
agustín malonda albero, arquitecto