Forma parte ya del lenguaje cotidiano denominar Zona Cero a aquel espacio (físico o no) que ha sido objeto de un acontecimiento de tal magnitud que, automáticamente, pone el contador a cero en la historia particular de ese sitio (físico o no): primero para que no se olvide y, segundo, para que todo pueda ser reformulado desde ese nuevo punto de partida. El momento actual de crisis generalizada puede convertirse (si no lo ha sido ya) en la Zona Cero para la arquitectura en nuestro país: un espacio de tiempo, concreto, a partir del cual nos veremos obligados a buscar nuevos caminos. / Forms part of everyday language to call Zero Zone to that space (physical or not) that has undergone an event of such magnitude that automatically sets the counter to zero in the particular history of that site (physical or not): first so that is not forgotten and, second, so that everything can be reformulated from this new starting point. The present time of general crisis can become (if it has not already been) at Zero Zone for Architecture in our country: a space of time, concrete, from which we will be forced to seek new ways.

6/8/12

¿VA A PONER ALGUIEN (LLÁMESE CSCAE, LOS COLEGIOS DE ARQUITECTOS...........) COTO A TANTOS DESMANES?

Lo que en su momento ya se adivinaba (ver entradas Concursos de DO en Andalucía ) como una batalla campal, el cuentagotas de los resultados provisionales de los cuatro concursos convocados va, tozudamente, dándonos la razón.
Los dos primeras direcciones de obra: (1º) IES en Almería y (2º) CEIP en Camas  ya han sido adjudicadas de manera provisional; si la apertura de las ofertas, a la vista de los requisitos exigidos (idénticos para las cuatro convocatorias) ponía los pelos de punta al más pintado, el desenlace de las dos primeras no desentonaría en cualquiera de las memorables películas de los Marx: un puro disparate.

Resumo.

La mayoría de los equipos presentados a ambos concursos alcanzamos, una vez baremada la oferta técnica (no económica: mejoras y demás exigencias), idéntica puntuación; la cifra de honorarios ofertados, cuya baja estaba limitada, por temeridad, al tope de 10 puntos porcentuales respecto de la media de las ofertas que, a su vez, no superaran el 20 % del precio de licitación fue, de manera general, superada por todos los participantes. Únicamente 5 de los 54 admitidos en el 1º y 14 de 91 en el 2º, propusieron ofertas económicas dentro del arco de viabilidad; el resto fuimos llamados a consulta para justificar el precio.

Una vez estudiadas –se supone- las justificaciones de cada participante, la Mesa determina que la mayoría de ellas son DESPROPORCIONADAS O ANORMALES y resuelve adjudicar, cada concurso, a unos equipos que, curiosamente, han presentado, si no las mayores bajas, si unas rebajas considerables: del 48,50% en el 1º y del 51,10% en el 2º, si la aritmética no me juega una mala pasada. Por poner un ejemplo –necesario para situar la altura del listón- nuestro equipo ofertó una baja del 27,10 % y del 26,20 %, respectivamente. Nuestra oferta económico-técnica, y la de otros muchos compañeros, ha sido calificada como que NO PUEDEN SER CUMPLIDAS A SATISFACCIÓN DE LA ADMINISTRACIÓN en virtud de su temeridad, sin embargo otras con idéntica puntuación en el apartado de mejoras exigibles, son, MENOS TEMERARIAS incluso con una baja económica con valores cercanos al doble de la nuestra: increíble, pero cierto.

Obviamente, acto seguido hemos exigido del Ente Público Andaluz de Servicios Educativos que la Mesa haga públicos los Criterios de Adjudicación, pero esta cuestión (algo que parece absolutamente razonable: que queramos saber, mínimamente, con qué criterios se adjudica) nos va a costar sudor y lágrimas. Seguro.

Enlaces con las Actas de la Mesas de los Concursos de las direcciones de obra:
ALMERÍA y CAMAS