Forma parte ya del lenguaje cotidiano denominar Zona Cero a aquel espacio (físico o no) que ha sido objeto de un acontecimiento de tal magnitud que, automáticamente, pone el contador a cero en la historia particular de ese sitio (físico o no): primero para que no se olvide y, segundo, para que todo pueda ser reformulado desde ese nuevo punto de partida. El momento actual de crisis generalizada puede convertirse (si no lo ha sido ya) en la Zona Cero para la arquitectura en nuestro país: un espacio de tiempo, concreto, a partir del cual nos veremos obligados a buscar nuevos caminos. / Forms part of everyday language to call Zero Zone to that space (physical or not) that has undergone an event of such magnitude that automatically sets the counter to zero in the particular history of that site (physical or not): first so that is not forgotten and, second, so that everything can be reformulated from this new starting point. The present time of general crisis can become (if it has not already been) at Zero Zone for Architecture in our country: a space of time, concrete, from which we will be forced to seek new ways.

4/5/12

REFUGIO MINERAL / FRUNDGALLINA EN COLOMBIRE

frundgallina, centre d´accueil et de restauration en Colombire, Mollens
Como resultado de un concurso celebrado en el 2004, el equipo de Neuchatel, frundgallina, formado por los arquitectos Jean-Claude Frund y Antonio Gallina, completaron en el 2009 una pequeña construcción, en la aldea alpina de Colombire cerca de Mollens en el cantón de Valais, destinada a divulgar el modo de vida alpino de la comarca, en medio de los impresionantes paisajes de los pastizales de alta montaña. Situada en la ladera de una montaña y junto a un grupo de cabañas autóctonas destinadas a la trashumancia del ganado, frundgallina diseñan una breve pieza enteramente realizada en hormigón que, intencionadamente, esconden, en parte, adaptándose a la pendiente de la montaña y de la que únicamente se aprecia, desde el abrupto camino de acceso, un prisma facetado que, en una vista lejana, dialoga formalmente con los dos refugios que lo flanquean.

frundgallina, centre d´accueil et de restauration en Colombire, Mollens
El programa resulta tan escueto como la propuesta; el volumen emergente contiene una zona de ingreso y la escalera que comunica con la planta inferior. A este nivel, el de acceso, el techo de la planta semienterrada se convierte en un balcón volcado sobre las amplias vistas del valle. En el nivel a media ladera, una estricta planta acoge las piezas higiénicas, la cocina (ya que el refugio ofrece el servicio de restauración de comida típicas de la zona), una oficina y una sala que sirve a la vez de comedor como para distintos eventos. Esta pieza rectangular, cerrada por sus tres lados, se abre hacia el valle con un gran ventanal que, a modo de marco, enmarca la vista “de postal” de la comarca y su entorno.

frundgallina, centre d´accueil et de restauration en Colombire, vista interior de la planta semienterrada
frundgallina, centre d´accueil et de restauration en Colombire, planta superior y alzado
frundgallina, centre d´accueil et de restauration en Colombire, planta inferior y sección
frundgallina, centre d´accueil et de restauration en Colombire, secciones
frundgallina, realizan una pieza concisa sacando el máximo partido a un único material: el hormigón. Este gesto de contención, esencial, obliga a los autores a trabajar la fluidez de la pasta previa con la máxima precisión constructiva para ofrecer un espacio mineral, en palabras de los autores, en la que exterior e interior quedan unidos por la pétrea presencia de la envolvente.

frundgallina, centre d´accueil et de restauration en Colombire, vistas exteriores
Constructivamente, el refugio se resuelve con un doble cascarón de hormigón: el exterior, que configura tanto los muros de contención como la parte emergente vista del pabellón, y el interior, que define los espacios habitables envueltos en una matriz cementosa. Entre las dos envolventes se dispone una importante barrera térmica de aislamiento. Esta arquitectura abstracta y gestual recuerda, vagamente, a la enigmática construcción realizada por Christian Kerez para la ermita en Oberrealta (izquierda) 










frundgallina cuentan con una obra no demasiado extensa pero de una notable factura; suyos son, entre otros, el centro escolar en Pully-Nord (1999/2002) (a la derecha) y:


Renovación de una residencia en Neuchatel (2004/07)









Establecimiento médico-social en Croy (2003/10)















Dos bloques residenciales en Evilard (2005/09)






















Fuentes:
+ Fotografías: Milo Keller
+ frundgallina, Quart Verlag, 2006
+ dessingboom.com